Friday, December 10, 2010
Monday, March 29, 2010
Monday, February 01, 2010
EL HOMBRE QUE TUVO EL SUEÑO DE DIOS
Había un hombre que soñó que era Dios. En su sueño, todas las cosas eran posibles. Si lo deseaba, en un momento podía descender hasta lo más profundo, arrojar su red y sacar peces grandes, carnosos, brillantes y plateados. Cuando arrojaba su red, el mar le mostraba su gran abundancia.
En su sueño era Dios y a su vista nada perecía, ni el ataque violento de las estaciones lo afectaba. Tuvo un sueño de gozo, y todas las cosas resonaban con una música que nunca era desentonada, siempre era armoniosa. En su sueño, todo vibraba y los matices de los colores trascendían la percepción humana. En este sueño todas las cosas se combinaban y daban origen a la canción que es el pensamiento de Dios.
Y Caminaba sobre praderas de color esmeralda, veía las flores brillar tenuemente en sus dorados pétalos. En ningún lugar de su sueño había furia, malicia, crítica o envidia. Tampoco había enfermedad, ni dolor, ni penas. Todo era como una eternidad que entonaba una canción de armonía. Así era el hombre que tuvo el sueño de que era Dios. En ninguna etapa del sueño consideró la posibilidad de estar soñando, y despertó para darse cuenta de que estaba dormido.
Ramtha.
En su sueño era Dios y a su vista nada perecía, ni el ataque violento de las estaciones lo afectaba. Tuvo un sueño de gozo, y todas las cosas resonaban con una música que nunca era desentonada, siempre era armoniosa. En su sueño, todo vibraba y los matices de los colores trascendían la percepción humana. En este sueño todas las cosas se combinaban y daban origen a la canción que es el pensamiento de Dios.
Y Caminaba sobre praderas de color esmeralda, veía las flores brillar tenuemente en sus dorados pétalos. En ningún lugar de su sueño había furia, malicia, crítica o envidia. Tampoco había enfermedad, ni dolor, ni penas. Todo era como una eternidad que entonaba una canción de armonía. Así era el hombre que tuvo el sueño de que era Dios. En ninguna etapa del sueño consideró la posibilidad de estar soñando, y despertó para darse cuenta de que estaba dormido.
Ramtha.
Wednesday, January 20, 2010
POR QUÉ EL CONOCIMIENTO ES IMPORTANTE?
¿Por qué el conocimiento es importante?
Es nuestro mayor tesoro. Pues cuando se os ha despojado de todo lo único que permanece y que nunca os será arrebatado es el conocimiento, que os da la habilidad para crearlo todo otra vez. Cuando tenéis el conocimiento tenéis libertad; tenéis opciones. Podéis construir reinos ilimitados, cuando tenéis el conocimiento no hay nada que temer, pues entonces no hay cosa, elemento, principio o concepto que pueda amenazaros, esclavizaros o intimidaros. Cuando el miedo se cambia por conocimiento, he ahí lo que se llama “iluminación.”
Hay muchos sobre vuestro bendito plano que están luchando arduamente para ser “iluminados”, algo realmente valioso. Sin embargo, hay pocos que entienden lo que el término significa. Ser iluminado simplemente significa estar “en luz de” tener conocimiento de; tener conocimiento disponible para poder aplicarlo de cualquier modo que elijáis.
Ramtha
Aquello que os ha amado, desde antes que empezara el tiempo, que ha estado con vosotros tras la muerte de vuestro cuerpo o su ascensión…sois vosotros.
Tú eres el único que te ama con suficiente constancia para haber pasado por todo lo que has vivido. Cuando te aceptes y te ames a ti mismo, y permitas a ese amor ser un patrón, trascenderás la conciencia social del hombre y llegarás a la conciencia total de Dios. Porque lo que tú eres va más allá de la belleza y de la perfección. Va más allá del contenido de las leyes, el dogma y los patrones sociales. Lo que tú eres deja atrás el destino y llega hasta la culminación del yo, que es la culminación de Dios. Eso es lo único importante a los ojos del ser de la vida.
Ramtha
Es nuestro mayor tesoro. Pues cuando se os ha despojado de todo lo único que permanece y que nunca os será arrebatado es el conocimiento, que os da la habilidad para crearlo todo otra vez. Cuando tenéis el conocimiento tenéis libertad; tenéis opciones. Podéis construir reinos ilimitados, cuando tenéis el conocimiento no hay nada que temer, pues entonces no hay cosa, elemento, principio o concepto que pueda amenazaros, esclavizaros o intimidaros. Cuando el miedo se cambia por conocimiento, he ahí lo que se llama “iluminación.”
Hay muchos sobre vuestro bendito plano que están luchando arduamente para ser “iluminados”, algo realmente valioso. Sin embargo, hay pocos que entienden lo que el término significa. Ser iluminado simplemente significa estar “en luz de” tener conocimiento de; tener conocimiento disponible para poder aplicarlo de cualquier modo que elijáis.
Ramtha
Aquello que os ha amado, desde antes que empezara el tiempo, que ha estado con vosotros tras la muerte de vuestro cuerpo o su ascensión…sois vosotros.
Tú eres el único que te ama con suficiente constancia para haber pasado por todo lo que has vivido. Cuando te aceptes y te ames a ti mismo, y permitas a ese amor ser un patrón, trascenderás la conciencia social del hombre y llegarás a la conciencia total de Dios. Porque lo que tú eres va más allá de la belleza y de la perfección. Va más allá del contenido de las leyes, el dogma y los patrones sociales. Lo que tú eres deja atrás el destino y llega hasta la culminación del yo, que es la culminación de Dios. Eso es lo único importante a los ojos del ser de la vida.
Ramtha
Tuesday, January 19, 2010
NO CREO EN NADA PERO DIGO CIERTAS COSAS.
Parafraseando a Marcel Duchamp, en su manifiesto surrealista, utilizo esta frase a manera de presentación de mi siguiente texto:
Después de estar inmerso los últimos meses en esta nueva o más intensa revolución espiritual en este llamado último ciclo de vida, o 13º Baktum Maya ó la llegada del rayo solar sincronizador ó el fin del mundo en el 2012, ó el fin de la 3ª y 4ª dimensión, ya sea el fin del ciclo Maya, Egipcio ó Musulmán, sea cual fuere la filosofía o religión que hable de un final o Apocalipsis o transformación o como cada quien lo quiera llamar, he llegado a mi propia conclusión:
Mucha gente habla de ser de los elegidos, de que solo aquellos que alcancen cierto nivel de conciencia serán elegidos o que pasaran a una quinta dimensión, se habla de una trascendencia intergaláctica, de salvación, etc. Y sin darnos cuenta vamos creando un dogma tan fuerte y radical como el de cualquier religión o filosofía terrenal. Así que no pienso hacer nada, simplemente "seré". ¿Quien será quien elija? Tal vez, cada uno de nososotros lo haga.
Nos hemos creado una cáscara, una envoltura. El ser que creamos a partir de nuestro nacimiento y que desarrollamos gracias a una educación social o religiosa o bien en base a experiencias vívidas, finalmente es el YO que somos. Uno más creado por una conciencia colectiva.
Si me detengo un instante y me quito esa gran envoltura y me libero de todos los dogmas de conocimiento, de conciencia colectiva, de experiencias, entonces no tendré necesidad de buscar ninguna salvación. ¿Por qué habría que temer a algo, si ya todo está escrito? Si cada cosa tiene su lugar en el espacio y en lo que llamamos tiempo. O si el tiempo en realidad no existe, si no hay nada escrito, si todo es una ilusión. ¿Por qué habríamos de precipitarnos a buscar una salida, una salvación? Tal vez la respuesta está en la no búsqueda, en regresar a lo más esencial que es el "ser".¿Porqué habría que pedir a través de la meditación que se me re-incorpore mi implante neutral o las famosas doce hélices de mi ADN, como se está haciendo saber a través de alguna comunidad cosmológica? ¿Que no dice la física cuántica que las posibilidades son infinitas? En este sentido no existe una "verdad" ya que cada quien tendrá la verdad en si mismo. Si como dice esta ciencia, podemos reconocer y aceptar el Dios que cada uno de nosotros somos, en realidad no habría nada que hacer porque el gran universo seríamos nosotros mismos. ¿Que tal si no hubiera nada fuera y todo estuviera dentro? ¿Que tal si no existiera la muerte, si el universo que somos fuera una vida eterna, si el vehículo que utilizamos para percibir lo llamado vida no fuera sino una escala o niveles de percepción del ser? Si la vida es infinita como la luz, como la música del universo, si todo no es más que una eterna resonancia de tonos que se repiten eternamente a diferentes niveles, (como lo proponen los Mayas), entonces ¿qué habría que temer? ¿Qué habría que buscar?Alguna vez en uno de mis viajes con hongos o peyote dije algo que ahora me parece bastante claro hablando de un nivel de conciencia personal. "Lo se todo y no tengo nada que decir. La creación es un canto hermoso. No hay principio ni fin, todo está en su lugar, todo es perfecto, no hay nada que temer".
Mi conclusión es que, no creo en nada y creo en todo. La verdad es totalmente subjetiva y cierta para quien la porta. Si el universo de las posibilidades existe, entonces aquello en lo que cada quien crea "será", si la materia solo se transforma, entonces se transformará en lo que cada quien pida o piense. Sin duda para mi, somos la creación de un Dios, sin duda somos él, sin duda tenemos la capacidad infinita de crear y destruir. Con este poder podemos en el lapso que nos corresponde vivir, crear dentro de nuestro tiempo físico castillos de amor, felicidad y paz, o de igual forma descender a los infiernos más oscuros que seamos capaces de imaginar.Si cerráramos los ojos un instante y tratáramos de ver, inmediatamente veríamos lo que somos: un destello de luz. Si no existe el tiempo para nuestro ser de luz, ¿que hay que temer? Cuando dejemos este vehículo perecedero llamado cuerpo, nos incorporaremos al todo o a la nada o a lo que cada quien quiera creer. Yo digo, hazte a ti mismo! créate a ti mismo, ve lo que quieras ver, siente lo que quieras sentir, muere y renace, trasciende o retrocede, se espiritual o no, júzgate con tu propia ley y castígate o prémiate como el propio juez que eres, como el propio Dios que eres. Provéete de los poderes que quieras y así será. Por supuesto que serás el elegido y entonces todos los horóscopos: chinos, mayas, solares y todos los oráculos, te dirán lo que tú quieras que te digan (¿que no es así ya?). Al final todos somos de todos, todos somos uno, juntos con este planeta y este universo.
En cuanto a mi. Seguiré mi camino, sigo actuando como aquel comediante que menciona Shakespeare, que se pavonea y es grande durante la hora que dura su papel, pero del que después nadie se acuerda. ¿No somos todos éste comediante, este actor? No me preocupa nada, reiré, claro que reiré y si me alcanza el famoso final, todo estará bien. Y si he acarreado karmas de otras vidas, ni modo; si los he de transmitir a la vida que me sigue, ni modo, aquel que se las arregle como me las estoy arreglando yo ahora. Total, tal vez todo empezó como una broma.
Bueno, me voy a mi clase de REIKI, bye.
Iván Gordillo (Santiago de Chile 2006)
Después de estar inmerso los últimos meses en esta nueva o más intensa revolución espiritual en este llamado último ciclo de vida, o 13º Baktum Maya ó la llegada del rayo solar sincronizador ó el fin del mundo en el 2012, ó el fin de la 3ª y 4ª dimensión, ya sea el fin del ciclo Maya, Egipcio ó Musulmán, sea cual fuere la filosofía o religión que hable de un final o Apocalipsis o transformación o como cada quien lo quiera llamar, he llegado a mi propia conclusión:
Mucha gente habla de ser de los elegidos, de que solo aquellos que alcancen cierto nivel de conciencia serán elegidos o que pasaran a una quinta dimensión, se habla de una trascendencia intergaláctica, de salvación, etc. Y sin darnos cuenta vamos creando un dogma tan fuerte y radical como el de cualquier religión o filosofía terrenal. Así que no pienso hacer nada, simplemente "seré". ¿Quien será quien elija? Tal vez, cada uno de nososotros lo haga.
Nos hemos creado una cáscara, una envoltura. El ser que creamos a partir de nuestro nacimiento y que desarrollamos gracias a una educación social o religiosa o bien en base a experiencias vívidas, finalmente es el YO que somos. Uno más creado por una conciencia colectiva.
Si me detengo un instante y me quito esa gran envoltura y me libero de todos los dogmas de conocimiento, de conciencia colectiva, de experiencias, entonces no tendré necesidad de buscar ninguna salvación. ¿Por qué habría que temer a algo, si ya todo está escrito? Si cada cosa tiene su lugar en el espacio y en lo que llamamos tiempo. O si el tiempo en realidad no existe, si no hay nada escrito, si todo es una ilusión. ¿Por qué habríamos de precipitarnos a buscar una salida, una salvación? Tal vez la respuesta está en la no búsqueda, en regresar a lo más esencial que es el "ser".¿Porqué habría que pedir a través de la meditación que se me re-incorpore mi implante neutral o las famosas doce hélices de mi ADN, como se está haciendo saber a través de alguna comunidad cosmológica? ¿Que no dice la física cuántica que las posibilidades son infinitas? En este sentido no existe una "verdad" ya que cada quien tendrá la verdad en si mismo. Si como dice esta ciencia, podemos reconocer y aceptar el Dios que cada uno de nosotros somos, en realidad no habría nada que hacer porque el gran universo seríamos nosotros mismos. ¿Que tal si no hubiera nada fuera y todo estuviera dentro? ¿Que tal si no existiera la muerte, si el universo que somos fuera una vida eterna, si el vehículo que utilizamos para percibir lo llamado vida no fuera sino una escala o niveles de percepción del ser? Si la vida es infinita como la luz, como la música del universo, si todo no es más que una eterna resonancia de tonos que se repiten eternamente a diferentes niveles, (como lo proponen los Mayas), entonces ¿qué habría que temer? ¿Qué habría que buscar?Alguna vez en uno de mis viajes con hongos o peyote dije algo que ahora me parece bastante claro hablando de un nivel de conciencia personal. "Lo se todo y no tengo nada que decir. La creación es un canto hermoso. No hay principio ni fin, todo está en su lugar, todo es perfecto, no hay nada que temer".
Mi conclusión es que, no creo en nada y creo en todo. La verdad es totalmente subjetiva y cierta para quien la porta. Si el universo de las posibilidades existe, entonces aquello en lo que cada quien crea "será", si la materia solo se transforma, entonces se transformará en lo que cada quien pida o piense. Sin duda para mi, somos la creación de un Dios, sin duda somos él, sin duda tenemos la capacidad infinita de crear y destruir. Con este poder podemos en el lapso que nos corresponde vivir, crear dentro de nuestro tiempo físico castillos de amor, felicidad y paz, o de igual forma descender a los infiernos más oscuros que seamos capaces de imaginar.Si cerráramos los ojos un instante y tratáramos de ver, inmediatamente veríamos lo que somos: un destello de luz. Si no existe el tiempo para nuestro ser de luz, ¿que hay que temer? Cuando dejemos este vehículo perecedero llamado cuerpo, nos incorporaremos al todo o a la nada o a lo que cada quien quiera creer. Yo digo, hazte a ti mismo! créate a ti mismo, ve lo que quieras ver, siente lo que quieras sentir, muere y renace, trasciende o retrocede, se espiritual o no, júzgate con tu propia ley y castígate o prémiate como el propio juez que eres, como el propio Dios que eres. Provéete de los poderes que quieras y así será. Por supuesto que serás el elegido y entonces todos los horóscopos: chinos, mayas, solares y todos los oráculos, te dirán lo que tú quieras que te digan (¿que no es así ya?). Al final todos somos de todos, todos somos uno, juntos con este planeta y este universo.
En cuanto a mi. Seguiré mi camino, sigo actuando como aquel comediante que menciona Shakespeare, que se pavonea y es grande durante la hora que dura su papel, pero del que después nadie se acuerda. ¿No somos todos éste comediante, este actor? No me preocupa nada, reiré, claro que reiré y si me alcanza el famoso final, todo estará bien. Y si he acarreado karmas de otras vidas, ni modo; si los he de transmitir a la vida que me sigue, ni modo, aquel que se las arregle como me las estoy arreglando yo ahora. Total, tal vez todo empezó como una broma.
Bueno, me voy a mi clase de REIKI, bye.
Iván Gordillo (Santiago de Chile 2006)
Sunday, January 03, 2010
EL SUEÑO DE DESPERTAR
¿Cómo conocéis la forma de abrir el gran séptimo sello, la pituitaria, el guardián del asiento del cerebro? ¿Cómo lo abrís? Si tratáis de lograrlo mediante drogas, moriréis. Si ensayáis los cánticos, os volveréis roncos. Si tratáis con la meditación, sólo correréis alrededor de las esquinas de vuestra caja. Lo lográis, al invertir con intensidad la actitud; entonces, desde ahí, empezaréis a cuestionar el otro lado de ella.
¿Qué es real y que es ilusión? Preguntad: “¿Qué tal si…?” Seguid preguntando y la pituitaria empezará a responder. Ese fantástico elixir brillante de hormonas comenzará a abrir el cerebro y la pituitaria florecerá como una flor de loto. Y los que “que tal si…” os llevarán más lejos a medida que abren el cerebro más y más, de modo que podáis aceptar y abrazar el pensamiento, la belleza de lo que Dios es, en todas las profundidades de su misterio. Eso es lo que abre el gran séptimo sello.
Las mentes perezosas, las mentes metafísicas, los maestros espirituales, las dietas, los cristales, los amuletos y los circones no hacen más que adornar la caja. Nada Más. Vais a morir bien adornados. Es que no está afuera; está adentro. Sois la máquina más maravillosa que se haya construido. Sois el cuerpo viviente de Dios viviente, y él está ahí, detrás de los sueños. Y el genio está ahí, en el punto donde la actitud se cambia.
La conciencia social es una ilusión; la emoción es una realidad y si pudierais aceptar eso, rápidamente comenzaríais a eliminar al guardián de todos los sueños, y ellos empezarían a fluir como un río. ¿Y a dónde van? ¡Regresan a Dios! Podríais mirar a la superficie de esos sueños, como si fuera una río, y ver vuestro rostro. Podríais mirarlo y decir “Soy yo”. Entonces poseeréis el saber que recorre todo el camino hasta la inmortalidad.
Estás en capacidad de ser genios. No es algo que yo os pueda dar, algo que pueda poner en vuestra mano. Ningún mensajero aparecerá portando el regalo del genio para que os adornéis con él. No es algo que conseguiréis besándole los pies a otro con la esperanza de que se os pegue algo.
Es algo innato para vosotros. El genio es la fuente que no ha sido consultada, el brillo, el salto cuántico de una vida que puede llegar hasta la eternidad.
El cuerpo es controlado por la pituitaria, la cual por medio del flujo hormonal, monta la glándula que produce la vida o la prepara para que termine.
Habéis poseído un poco de emoción la cual invertisteis en vuestra fantasía, pero todavía no poseéis el genio. Hasta que invirtáis la emoción, el próximo paso en manifestación os dejará preguntando que pasó y desechando el proceso.
Ramtha
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